«Las ovejas comen paja porque ya no hay pasto»
24/11/2017
En: elperiodicodearagon.com
Digital
Las consecuencias de la sequía son visibles también en el ganado, especialmente el ovino, acostumbrado a pastar en los campos donda ahora solo hay paja y piedras. La situación se agrava y en algunas zonas tienen que abastecerse de pienso y granulado que encarece el producto y reduce los ya de por sí escasos beneficios del productor.
Amado posee un rebaño de 1.200 ovejas, pastoreado por Ahmed. Es el más grande de una zona en la que apenas quedan 5 ganaderos y poco más de 2.000 cabezas. «Hoy Ahmed los ha llevado a un sitio donde dice que hay mucha comida. Cómo será la situación de grave que esa comida es simple paja», se lamenta Amado, quien admite que no había visto una situación «de sequía tan grande» en toda su vida. «Vamos tirando como podemos, pero lo cierto es que sin la PAC no sobreviviríamos, quizá ni existiría esta carne», reconoce, al tiempo que muestra su malestar «con un Gobierno que nos ha dejado abandonados y nos deja fuera de ayudas por una sequía que es de una gravedad extrema. Estamos muy molestos», indica.
De seguir así, tendrá que recurrir al pienso, lo que hasta ahora no ha hecho falta. Eso sí, cada día tiene que comprar 7.500 litros para que las ovejas beban una cuba de agua, ya que en toda la zona se han secado los navajos o pequeñas pozas en las que podían beber de forma natural durante la jornada. Ahora, se preparan abrevaderos artificiales que permitirán a los animales beber al final del día. «Lo ideal sería que bebieran a mitad de la jornada, pero al no haber agua tienen que hacerlo cuando vienen a dormir» a los establos.
Si el ganado ya es de por sí un sector en crisis, las consecuencias de la sequía pueden agravarlo en los próximos meses.