Juan Javier Ríos Juan Javier Ríos Barcelona, 4 feb. (EFE).- Las bodegas españolas están tirando de unión y formación de prescriptores para dar a conocer su producto y abrirse a nuevos mercados con el fin de conquistar a unos compradores internacionales que, cada vez más, buscan vinos que cuenten "historias" del territorio en el que se asientan. Estas son algunas de las ideas que se están exponiendo en la segunda jornada del salón Barcelona Wine Week en el que se desarrollan ponencias enfocadas en el negocio vitivinícola o sobre cómo mejorar estrategias para diversificar destinos. Una de las participantes ha sido la directora de la Industria Alimentaria de ICEX España Exportación e Inversiones, María Naranjo, quien ha detallado cómo la red de más de 100 oficinas a nivel global fomentan la formación de profesionales para convertirlos en prescriptores de los vinos españoles. Naranjo ha asegurado que, una vez conocen el producto, "vienen a al territorio y se enamoran" porque "es muy fácil convencerlos para que vengan a ver las bodegas". En la misma mesa redonda ha participado el director general de la DO Rueda, Santiago Mora, quien ha valorado el trabajo del ICEX y ha reconocido que los vinos con esta DO han logrado "más foco internacional" con el paso de los años y eso les ha facilitado la llegada de prescriptores al territorio. Son visitas que suponen una "oportunidad de oro" para que las bodegas y el sello de calidad transmitan "su personalidad, identidad y todo lo que le hace diferente". Desde la DO Cava, su secretario general, Alexandre Comellas, ha explicado el programa de formación de prescriptores que impulsaron en la pandemia y que ya se ha asentado con programas de pequeño formato, algo en lo que "nos ha ayudado mucho ICEX". Traen a más de un centenar de prescriptores al año y las bodegas "descubren nuevas oportunidades sobre cómo transmitir sus valores y particularidades". La unión como clave Precisamente en un desayuno con los medios, los organizadores del salón, encabezados por el presidente de la BWW, Javier Pagés, y por la directora del evento, Céline Pérez, han destacado la labor "clave" que desarrollan con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y con ICEX para impulsar el negocio en la feria e identificar países de interés. Son cerca de 800 compradores internacionales de 69 países que se están reuniendo con las más de 1.200 bodegas participantes en espacios creados al efecto, como el Hosted Buyers' Lounge. La demanda de compradores ha superado sus previsiones por lo que la intención es incrementarla el año que viene, según han expuesto los organizadores. En cuanto al perfil de estos compradores, "muchos" llegan buscando "diversidad" de vinos y estilos, con un especial interés por conocer denominaciones de origen pequeñas. Buscan "uvas nuevas o que estén especialmente comprometidas con la sostenibilidad" y a los prescriptores les encantan también los vinos que "cuentan historias", es decir, los que tienen detrás un "compromiso personal con las bodegas". Las bodegas pequeñas Un ejemplo de ello es el centenar de historias de bodegas y viñedos familiares que tienen un espacio reservado en el salón, gracias a la labor de la asociación Artisan Wine Attraction, a la que pertenecen. Han acudido desde todo el territorio nacional y aunque son negocios vinícolas a pequeña escala también tienen su vista puesta en el comercio exterior, según ha indicado a Efeagro su presidenta, Pilar Higuero. Acaban de ser reconocidos como asociación, si bien llevan trabajando juntos 14 años con el fin de "crear gremio" y defender unas bodegas que apuestan por lo "ecológico, biodinámico, sin químicos y por unos vinos honestos", ha resaltado. Blanca Ocáriz pertenece a la asociación y acude a la Barcelona Wine Week para informar y dar a probar los vinos de su bodega familiar "El Jardí dels Sentits (Alt Penedès)" obtenidos en 10 hectáreas de viñedos. Vende el 90 % de la producción fuera de España siendo uno de los principales clientes Estados Unidos pero, ante las dudas que le plantea nueva política arancelaria de Donald Trump, quiere diversificar el negocio. De hecho, irá próximamente a ferias en Tokio y Shangái porque quiere abrir mercado en ese rincón del mundo, según ha indicado a EFE. Se muestra defensora de la "sostenibilidad, la ecología y también por trabajar juntos como gremio" para llegar "más lejos". EFE jjr/lrs