La reutilización y los controles de calidad del agua, claves para afrontar la sequía
Textos: Núria Bonet
Diseño: Estela Piñeiro
El agua desalinizada ya supone el 33% del agua potable suministrada en el área metropolitana de Barcelona, y el agua regenerada llega al 25% del total. Ante la falta de lluvia, se prioriza la reutilización indirecta.
L a sequía y la falta de recursos hídricos ya no son una temida amenaza si no que se han convertido en una dura realidad en el área metropolitana de Barcelona. Con medidas como el ahorro del consumo del agua se quiere paliar el efecto de tantos meses seguidos sin lluvia pero la regeneración y reutilización del agua se han convertido en una línea clave de actuación que permite abastecer a la metrópolis y garantizar un caudal ecológico en el río Llobregat.
Desde hace años se emplea la reutilización del agua en el territorio metropolitano para dar respuesta a diversas necesidades, como son la inyección de agua regenerada en el acuífero profundo del Delta del Llobregat para evitar la intrusión salina , o para mantener el caudal ecológico en los tramos finales del río, o bien para regar los cultivos, entre otros usos.
Pero desde el Àrea del Cicle de l'Aigua i Anàlisi de Polítiques Metropolitanes del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) se ha dado un paso más apostando por la introducción de recursos hídricos alternativos en el ciclo del agua que contribuyen a garantizar el suministro.
Este volumen de agua actualmente reutilizada en el territorio metropolitano equivale al 25% del consumo de agua potable de toda la metrópolis . Y todavía otra equivalencia para ver la importancia de esta medida: los 56hm 3 de agua reutilizada cubriría el 50% de las necesidades anuales de agua potable de la ciudad de Barcelona.
A diferencia de lo sucedido en el anterior periodo de sequía, entre 2007 y 2008, los recursos alternativos que están marcando ahora la diferencia son la desalinización del agua de mar y la regeneración , incluyendo la reutilización potable indirecta. Actualmente, el agua desalinizada supone el 33% del agua potable suministrada en el territorio metropolitano y el agua regenerada otro 25% del total.
Fernando Cabello
Director de Serveis del Cicle de l'Aigua del AMB
"La situación actual nos hace priorizar la reutilización indirecta porque toda el agua que podamos generar es poca".
La reutilización indirecta
Tras meses de sequía, en 2022 se puso en práctica una medida adicional para el aprovechamiento extraordinario del agua regenerada: la reutilización potable indirecta (RPI). Se trata de una medida prevista en el Pla Especial de Sequera de l'Agència Catalana de l'Aigua (ACA) per a situacions excepcionals, que consiste en la aportación adicional de un caudal de agua regenerada al río Llobregat de forma que se consigue mejorar la calidad y cantidad del caudal circulante y esto permite emplear el agua como recurso prepotable, que se emplea para el abastecimiento urbano. Esta medida está siendo un éxito gracias a la colaboración del AMB con el ACA, que lidera el proyecto, la Agencia de Salud Pública de la Generalitat de Catalunya y la empresa mixta Aigües de Barcelona, Empresa Metropolitana del Cicle de l'Aigua.
La reutilización indirecta funciona de la siguiente manera: se aporta agua regenerada de forma adicional al caudal del río Llobregat para mejorar la cantidad y calidad del caudal circulante, como recurso prepotable, para reforzar el abastecimiento urbano.
El agua regenerada empleada en la reutilización indirecta proviene de la Estación Regeneradora de Agua (ERA) del Prat de Llobregat . Ahí llega el agua tratada en la Estación Depuradora de Aguas Residuales del Prat de Llobregat (EDAR ), y una vez tratada, se mezcla con el agua del río Llobregat convirtiéndose, así, en un recurso extra para la producción de agua potable.
Los datos confirman que el agua regenerada es la vía para evitar el malgasto de agua potable
Control exhaustivo de los vertidos en origen
La importancia del control de los vertidos desde su origen es fundamental , puesto que de ello dependerá la calidad del agua reutilizada. Tanto las aguas residuales de uso doméstico como industrial tienen un impacto directo en la calidad de las aguas que luego se regenerarán. En un contexto de sequía, cuando es más necesario recurrir a recursos alternativos, el control de calidad de las aguas residuales es necesario y exhaustivo.
El Servicio de Saneamiento e Inspección del AMB es quién lleva a cabo el control de los vertidos de aguas residuales que realizan las industrias ubicadas en el territorio metropolitano. Se siguen procedimientos estrictos conforme a las normas ISO 9001:2015 y 14001.
Actualmente hay censadas más de 6.600 actividades industriales activas, el 43% de las cuales se consideran potencialmente contaminantes. Pertenecen a la industria química, farmacéutica, metalúrgica y alimentaria, en su mayor parte.
El control de la industria es prioritario
"El control de la industria es prioritario y para ello existe un equipo de inspectores que salen a diario, efectúan controles visuales y extraen muestras de los colectores", exponía Fernando Cabello, director de Serveis del Cicle de l'Aigua del AMB, y añadía que "el éxito del servicio no es abrir un expediente sancionador si no un efecto disuasorio".
Éxito de la reutilización indirecta en el río Llobregat
La aportación de agua regenerada al Llobregat 8 Km por encima de la potabilizadora de Sant Joan Despí permite mantener un caudal constante de agua al río, garantizando la disponibilidad para su potabilización.
Esta campaña ha permitido el ahorro de un 21-22% de agua potable de la metrópolis que ha sido sustituida por agua regenerada.
Actualmente, se están enviando 1.500 litros por segundo de agua regenerada al Llobregat.
Publicado en EL PERIÓDICO el 30 de noviembre de 2023
Texto: Núria Bonet
Diseño y producción: Estela Piñeiro
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