Fernández Carriedo destaca que la comunidad crece un 3,5%, tres decimas más que la media nacional Llegan buenas noticias para la situación económica de Castilla y León, ya que cerró el año 2024 con un crecimiento del 3,5 por ciento, cinco décimas por encima de la previsión de la Junta, gracias a la industria, la agricultura y el comercio exterior. Así lo destacó el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, durante la presentación de los datos de la Contabilidad Regional de Castilla y León, donde se constata un importante avance el año pasado de la agricultura y la ganadería del 11,2 por ciento, tras el desastre de los dos ejercicios anteriores por la sequía. Asimismo, informó de que el Producto Interior Bruto (PIB) autonómico se vio impulsado por un buen comportamiento de la industria, que creció un 3,9 por ciento; mientras que los servicios avanzaron un 3,2 por ciento, y la construcción un 2,2 por ciento. Cabe desatacar la aportación de seis décimas el sector exterior a ese crecimiento, en un año récord de ventas fuera de las fronteras españolas y que situó a Castilla y León como la comunidad en la que más crecieron las exportaciones en 2024. Al respecto, recordó que la Junta inició el año con una moderada previsión del 1,7 por ciento, que modificó hasta el tres por ciento, por la buena marcha del tejido productivo, con un cierre del año mucho mejor de lo esperado, hasta el 3,5 por ciento. El dato de crecimiento de 2024 es ocho décimas superior al de 2023 (2,7 por ciento) e iguala el de 2022. Además, Fernández Carriedo, también puso en valor que la economía de Castilla y León subió tres décimas más que la media de España y triplica los niveles de la Unión Europea, que alcanzó el uno por ciento, y de la Zona Euro (0,9 por ciento). En este sentido, recalcó que la Comunidad está acelerando la convergencia con Europa. Desde el punto de vista de la demanda, el mayor aumento del PIB en 2024viene explicado por una mayor contribución de la demanda interna, que fue del 2,9 por ciento, frente al 2,6 por ciento de 2023, y de la demanda externa que pasó del 0,1 por ciento al 0,6 por ciento. Con relación al sector agrario, destacó que mientras la producción agraria ha experimentado un notable crecimiento respecto a los dos últimos ejercicios, el sector ganadero no se comportó de la misma forma debido al incremento de los coste de producción, a pesar de que anotarse una menor contracción que en 2023. En cuanto a la construcción, que creció por debajo de los dos últimos años, el consejero explicó que esta bajada es fruto del incremento de los tipo de interés y aseguró que las previsiones para este año son favorables. También el consejero que la economía de Castilla y León sube tres décimas más que la media de España y triplica los niveles de la Unión Europea, que alcanzó el 1 por ciento, y de la Zona Euro (0,9 por ciento). En este sentido, recalcó que la Comunidad está acelerando la convergencia con Europa. Por su parte, la inversión (formación bruta de capital) registró una variación anual menor que en 2023, debido a un menor aumento de la inversión en bienes de equipo, que creció un 2,8 por ciento -3 por ciento en 2023-, mientras que la inversión en construcción registró un mismo crecimiento -2,9 por ciento-. Previsiones para este 2025 De cara al presente ejercicio, en el que la Junta ha estimado un crecimiento económico del 2 por ciento, Fernández Carriedo explicó que el comportamiento vendrá marcado por tres factores: la guerra de Ucrania y el conflicto de Oriente Medio; la evolución económica de algunos países europeos como Alemania, que siendo uno de los principales destinos de las exportaciones de Castilla y León, están en recesión, y la corriente proteccionista de los mercados internacionales como consecuencia de la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, informa Ical. No obstante, el consejero explicó que para intentar paliar los posibles efectos negativos que estas situaciones pueden tener en las exportaciones de la Comunidad, la Junta está intentado abrir nuevos mercados, especialmente en el Asia y en el norte de África, así como fortaleciendo las líneas de ayuda al comercio exterior.