Tradición y amor al terruño. Pero también calidad, innovación y vanguardia, además de unidad y liderazgo. Estas eran algunas de las palabras que más se escuchaban ayer en la localidad vallisoletana de Peñafiel, con motivo de la celebración de los 90 años de Bodegas Protos.
Un acto que se celebraba en plena vendimia en esta zona de la Ribera del Duero vallisoletana, que contaba con el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y que respaldaba también con su presencia la ministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, la vallisoletana Isabel García Tejerina, entre otras muchas autoridades, empresarios del mundo del vino así como rostros conocidos como los de Vicente del Bosque, Fernando Savater, Juan Luis Arsuaga o el medallista olímpico David Cal y el bailarín Víctor Ullate, que participaban en un debate moderado por la periodista Pepa Fernández.
Y una fiesta en la que se lanzaba un mensaje claro: que la industria vitivinícola se ha convertido, por méritos propios, en punta de lanza de la transformación del medio rural así como en uno de los símbolos de Castilla y León.
«El vino es sinónimo de vida, de actividad económica y de futuro. Y Bodegas como Protos son, por este motivo, las que marcan el camino que hay que seguir en el futuro para hacer de Castilla y León la mejor región de la España autonómica y del mundo», señalaba Herrera en su intervención.
El jefe del Ejecutivo regional recordaba el peso de esta tierra en el mercado del vino a nivel nacional, donde uno de cada cuatro vinos que se consumen en nuestro país proceden de alguna bodega castellano y leonesa, destacaba la apuesta por la calidad y la innovación de un sector que cuenta con trece denominaciones de origen y con 650 bodegas que dan trabajo a más de 20.000 familias, la mayoría del medio rural, que mueve más de mil millones de euros al año.
La ministra, por su parte, apuntaba hacia el buen momento que vive la industria del vino en España, líder mundial en exportación de vino en volumen, con más de 2.700 millones hasta julio, y con una demanda creciente por parte de los consumidores.
También ponía en valor el buen hacer de Bodegas Protos en estos 90 años de historia, así como su apuesta por la calidad a través de una vendimia manual y la innovación para controlar el estado de la uva en todo el proceso.
Presente en un centenar de países Bodegas Protos -el primero, en griego- cumple 90 años de su primera vendimia, cuando un grupo de visionarios instalara las primeras cepas junto al río Duero a su paso por la localidad vallisoletana de Peñafiel. Desde entonces, sus vinos están entre los más reconocidos del mundo, y presentes en casi un centenar de países. La cesión de su nombre a la Denominación de Origen Ribera de Duero en 1982, sus dos kilómetros de galerías bajo el Castillo, o las nuevas bodegas diseñadas por Richards Rogers que atraen cada año a más de 30.000 personas, son algunos atractivos de esta bodega que apuesta por la calidad para seguir abriéndose camino en el mundo.