Los agricultores europeos llevan meses movilizados porque divisan un negro futuro. Sin duda son importantes estas movilizaciones, que además cuenta con la empatía de la mayoría de la población. Pero hay algo que no me agrada.
¿Se han levantado contra las políticas agrícolas y ganaderas aprobadas por nuestros fanáticos políticos de la Agenda 2030, que están destruyendo el campo y por lo tanto el futuro de sus hijos? ¿O más bien están movilizándose por sobrevivir el presente, sin preocuparse del futuro? Muchos se están conformando con unas migajas para sobrevivir unos pocos años. Están alcanzando unos objetivos ya calculados por el poder en la táctica de la zanahoria y el palo. Si realmente estamos preocupados por la agricultura, la ganadería y la pesca, las movilizaciones solo pueden buscar un objetivo: garantizar el futuro de estas actividades para crear puestos de trabajo y evitar que se vacíen, aún más, nuestros pueblos. La zanahoria atada al palo son las versiones de la política agraria común (PAC) que nos han ido enseñando y conduciendo hacia la destrucción. La liberalización del mercado solo puede pasar por exigir que los productos importados de fuera de la Unión Europea pasen por los mismos controles de calidad y de derechos laborales que los que nos exigen en la UE. Si no es así, es de entender que no es posible un cambio generacional en el campo y la ganadería y la pesca. Y que nuestros campos se reconviertan entonces en campos de placas solares, con poco valor económico a causa de la saturación de esta industria eléctrica.
Eduardo Félez Gutiérrez. CUARTE DE HUERVA (ZARAGOZA)
¿Carretera o camino de cabras?
En pleno siglo XXI hay carreteras en Aragón que de carreteras solo tienen el nombre. El estado de la A-230 es lamentable. Es una carretera autonómica que conecta Caspe con Sariñena, pero cualquier camino rural está mejor. Desde hace muchos años utilizamos esta vía y nunca había estado tan mal. Siempre ha sido una carretera estrecha y sin una adecuada señalización horizontal, pero desde hace unos meses el firme está muy deteriorado e impracticable. Desde Castejón de Monegros hasta Sariñena no hay un solo kilómetro bien. Los baches son continuos. Algunos, tan grandes y profundos que cabe media rueda. Tienes que ir muy despacio, porque es imposible ir a la velocidad acorde con la categoría de la carretera. Cualquier despiste puede provocar una avería o un accidente. Desconozco si los responsables de las carreteras en nuestra Comunidad conocen esta circunstancia, pero si se desplazaran alguna vez por esta carretera pronto buscarían alternativas para no volver por ella. Si queremos potenciar el turismo y dar a conocer nuestro territorio, necesitamos vías seguras. Por ello, una rápida actuación en la A-230 es urgente y necesaria.
José Carlos Jover Jordán. CASPE
Por una Zaragoza limpia
La locución 'caer en saco roto', que viene de las Sagradas Escrituras, significa ser inútil el esfuerzo, especialmente al no conseguir que se tenga en cuenta un consejo o petición. Bien podría atribuírsele esta expresión a la alcaldesa zaragozana respecto a la limpieza de la ciudad, que hasta el momento ha dejado bastante que desear. Porque no debería haber distinción entre los ciudadanos zaragozanos, ya que mientras algunos centros neurálgicos, como pueden ser el paseo de la Independencia o el de Ruiseñores, están saturados de patrullas de limpieza, con sus carritos hasta los topes, otras vías populosas y céntricas también, como el Camino de las Torres y la avenida de Cesáreo Alierta, están cada vez más llenas de suciedades de todo tipo. Como ciudadanos responsables, para tener una Zaragoza limpia y ejemplar, todos debemos colaborar.
Miguel Sánchez Trasobares. ZARAGOZA
Mentiras y traición
Sánchez Pérez-Castejón engaña y miente por sistema. Tal forma de actuar es inadmisible en un presidente de Gobierno. Si cabe, es mucho peor la humillación a la que está siendo sometido por determinados delincuentes a los que va a amnistiar. Les concede la amnistía no por la convivencia, argumento que ya nadie cree, sino por siete votos que le permitan mantenerse en el poder. Así se confirma con las declaraciones del prófugo Puigdemont. Está destruyendo el Estado de derecho. Es una traición por la que llegará el día en que tendrá que rendir cuentas. No solo Sánchez, también todos los diputados y senadores socialistas que, con su voto favorable, están colaborando activamente. Ninguno de ellos llevaba en su programa electoral lo que están haciendo. Han engañado a sus votantes y al conjunto de los españoles. No es aceptable que se justifiquen con la disciplina de partido al ejercer el voto. No todo vale para conservar el puesto y la remuneración económica. La traición perjudica gravemente a los españoles y a España. Deben tenerlo muy presente.
Joaquín Mañeru López. ZARAGOZA
El dedo meñique
El dedo meñique es el más pequeño, pero sin él la mano perdería el 50% de su fuerza. El nombre parte de 'menino', que en portugués significa niño. El meñique puede tener distintos significados. En algunas culturas se enlazan los meñiques de dos personas como signo de promesa. En Japón, tener levantado el meñique al hablar sobre dos personas significa que están vinculadas sentimentalmente. En ese país existe un ritual que se llama 'yubitsume', como una manera de castigo o disculpa por haber ofendido a alguien, y consiste en cortarse parte del propio meñique. En China se considera vulgar levantar y enseñar el dedo meñique a otra persona, como en occidente levantar el dedo medio. En Norteamérica, llevar un anillo en el meñique indica que la persona es abierta y cariñosa. En India, levantar el dedo meñique es señal de amistad rota. En Indonesia, si un hombre levanta el meñique es que tiene ganas de orinar. El 'anillo de hierro' canadiense es portado por ingenieros en el meñique. En los Balcanes, si un hombre se ha dejado crecer la uña del dedo meñique significa que está soltero. En Reino Unido, se consideraba un requisito social levantar el meñique mientras se bebía. En algunas partes del Medio Oriente, como Irán, al contar con los dedos de la mano se empieza por el meñique.
Antonio Nadal Pería. ZARAGOZA
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