Menú Gastronomía Heroínas del campo y la cocina reclaman valor para su trabajo La chef gallega Lucía Freitas pide «horarios dignos», y las mujeres del agro un «precio justo» a sus desvelos en la clausura de FéminAS Después de tres días de compartir experiencias y reflexiones, el primer Encuentro Internacional de Gastronomía, Mujer y Medio Rural finalizó ayer en Asturias con una llamada de atención a la sociedad para que otorgue el valor que se merece al trabajo de las mujeres rurales. Cocineras como la gallega Lucía Freitas o la italiana Viviana Varese y productoras como la mariscadora Rita Míguez, la ganadera Lucía Velasco o la agricultora Eva Sañudo pusieron sobre la mesa los cambios necesarios para asegurar el futuro de un mundo rural sin el que no puede haber gastronomía. «Ni nosotras, ni nuestras comunidades, ni el planeta soporta este sistema ¡ el cambio tiene que ser ya ! ». Un grito que sonó revolucionario ante un auditorio formado por mujeres acostumbradas «a cuidar, a darlo todo, a sacrificar el doble para llegar al mismo sitio». La portavoz del sentir general fue probablemente Lucía Freitas, que tras una brillante ponencia culinaria en la que mostró su delicado trabajo en torno a las verduras, dedicó su despedida a coger por los cuernos el problema de la mayoría de quienes se dedican a la hostelería. «Gracias a la pandemia conocí una vida familiar que antes no tenía, disfruté por primera vez de ser madre, aprendí a cuidar de mi huerto y a concebir los platos desde la semilla», confesó. Ahora que volvemos a una cierta normalidad, no parece dispuesta a regresar a la vida de ausencias y sacrificios que le ha aupado hasta la cima de la gastronomía gallega. «Si queremos un futuro para la hostelería debemos cambiar las reglas del juego -advirtió- tenemos derecho a disfrutar de la familia, de tiempo para nosotros». Para lograrlo cree que es necesario «reeducar a la clientela y reestructurar los equipos para que tengan vida». Por eso en su restaurante A Tafona no se puede uno sentar a la mesa más tarde de las 21.30. «Cocinar es un oficio apasionante, pero no debe ser una forma de vida, o cambiamos ya o no quedará nadie que quiera dedicarse a esto». Un problema parecido viven las mujeres del campo que nutren las despensas de los restaurantes. Cuesta encontrar ejemplos de jóvenes que estén dispuestas a renunciar a las comodidades urbanas para trabajar de sol a sol en la huerta o con las vacas. «Somos superheroínas», decía con orgullo la ganadera Lucía Velasco en la mesa redonda que compartió con la mariscadora Rita Míguez y la agricultora Eva Sañudo. Pero no tanto por desarrollar una actividad que ellas mismas han elegido y que disfrutan, sino por el escaso valor que el mercado otorga a lo que hacen. «El consumidor sabe perfectamente lo que vale el trabajo del campo, otra cosa es que la distribución nos tome por el pito de un sereno», protestó la 'vaqueira'. En su caso el futuro del sector primario pasa por pagar un precio digno. «No podemos vender a 32 céntimos una leche que nos cuesta 36». ¿Ayudas? «Nosotras lo que queremos es vivir de nuestro trabajo», reclaman. Sin esa revalorización de la producción agraria «nos quedaremos sin gente en el campo, porque el que se va no vuelve». En el tintero quedó buscar las fórmulas para que el mercado esté dispuesto a pagarle al campo lo que vale. De darse a valer versó el debate sobre liderazgo femenino que protagonizaron Lourdes Planas, presidenta de la Real Academia de Gastronomía; la ingeniera Sara Gómez y las cocineras Susi Díaz, de La Finca, y Pepa Muñoz, de El Qüenco de Pepa. «Las universidades y las empresas están llenas de mujeres pero si miramos hacia arriba, en los puestos de dirección encontramos muchas menos». Estuvieron de acuerdo en que para liderar equipos, «tanto si eres hombre como mujer, hay que estar bien preparado, sacrificarse y tener una mirada innovadora», pero entienden que ellas pueden hacerlo de una manera diferente. «No hemos dejado de oír a las cocineras de este congreso hablar de amor, cuidados, solidaridad o empatía», apuntó la ingeniera Sara Gómez. «Es nuestro momento para imponer esos valores y cambiar la deriva que lleva el mundo». Tendencias Vacuna Las caras del deporte Crónica negra Sucesos HOY Agro En Salsa