El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha apuntado este miércoles a la diversificación de los mercados como la gran apuesta del sector del vino, la aceituna y el cava. El jefe del Ejecutivo regional ha realizado estas declaraciones en Almendralejo, donde ha participado en la inauguración del XXI Salón del Vino y la Aceituna de Extremadura, IBEROVINAC. Allí, el presidente ha reflexionado sobre la importancia de la alimentación en el momento actual y ha señalado que la población mundial "ha perdido la ingenuidad respecto de lo que significa y representa". En este sentido, ha indicado que "hay una gran preocupación por la hambruna en el mundo y por ello la ganadería y la agricultura son sectores que se encuentran en el frontispicio de las preocupaciones de quienes tienen que tomar decisiones al máximo nivel". Además, ha indicado que la subida de precios como consecuencia de la guerra en Ucrania ha propiciado que la alimentación adquiera aún mayor trascendencia, un fenómeno que ha unido al crecimiento exponencial de la población el mundo, que alcanzará el horizonte de los 9 mil millones de ciudadanos en la primera mitad de este nuevo siglo. Por ello, ha considerado que hay que seguir apostando por la venta a los nuevos mercados y por la diversificación, reiterando que han supuesto la gran revolución y el gran cambio del sector en los últimos 30 años. El presidente ha recordado que desde que se pusieron en marcha las ayudas a la modernización y a las reestructuraciones en los últimos 21 años, se ha actuado sobre más de la mitad de las 80 mil hectáreas de viñedo en Extremadura que se han visto afectadas por inversiones en esta materia. "Ese es el camino a seguir, del mismo modo que lo es seguir mejorando en la productividad y en la competitividad", ha apostillado. Soberanía Agraria El responsable del gobierno regional ha relatado que la pandemia ha servido para tomar conciencia de la necesidad de construir una Europa fuerte, lo que significa recuperar parte de la soberanía que hemos ido perdiendo y que cedimos al sudeste asiático, sobre todo en materia de producción industrial. Al hilo de esta reflexión ha señalado que es absolutamente imprescindible la recuperación de la soberanía en el ámbito agrario, aún más cuando la guerra de Ucrania ha puesto de manifiesto que podemos quedarnos sin la producción de maíz y girasol. "Es fundamental que recuperemos la soberanía agraria, industrial y energética", ha subrayado. El presidente se ha referido además al cambio generacional de las empresas en Extremadura, un cambio espectacular que supone una nueva y mejor visión para entender la complejidad del mundo en el que vivimos. "No se puede analizar esa complejidad desde posiciones históricas simplistas", ha incidido. Además ha apelado a la unidad de empresas, administraciones y trabajadores para que Extremadura pueda competir en sectores en los que la fortaleza procede de esa unidad y ha recordado que la administración que presidente trabaja "modificando leyes de manera clara para ganar en simplificación administrativa". En su intervención, el presidente también se ha referido a la lucha del cava y ha sentenciado que "esta batalla la vamos a ganar porque tenemos la razón de nuestra parte". "Hemos conseguido tener más de 1700 hectáreas para producir cava de mucha calidad, lo que supone que se comercialicen más de 6 millones de botellas al año y, que un horizonte muy próximo, nos acercará a los 10 millones", ha apostillado, al tiempo que ha indicado "que la calidad de nuestro cava contribuye excepcionalmente a la consolidación de la marca Extremadura. " También se ha referido al proyecto de Regadíos de Tierra de Barros como una absoluta e imperiosa necesidad. "Si queremos que algún día desaparezcan las ayudas, nos tienen que dejar competir en las mismas condiciones que el resto en un mundo", ha considerado. Por último Fernández Vara, ha expresado su confianza en el futuro de Extremadura, señalando que todo lo que sucede en el mundo abre un abanico de posibilidades. "Nunca como ahora tienen valor el suelo, el sol, el agua, la seguridad jurídica, la seguridad ciudadana y vivir a la manera en la que vivimos en Extremadura". "No podemos renunciar a aprovechar estas oportunidades que no tuvieron nuestros padres en beneficio de nuestra tierra, de la marca Extremadura y de la generaciones que vienen por detrás de la nuestra", ha culminado.