El saldo vivo del crédito concedido a la actividad agraria (sin pesca) se elevó a 30 de septiembre pasado a 20.769 millones de euros, con un aumento del 0,6% respecto al trimestre anterior y del 3,5% sobre un año antes, según los datos recabados por el Ministerio de Agricultura de la Central de Balances del Banco de España.
El nivel de endeudamiento del sector agrario, con tales cifras en esas fechas, fue equivalente al 68,7% de la Renta Agraria Anual (segunda estimación del año 2018).
Por su parte, la deuda de la actividad de la industria agroalimentaria ascendía hasta esa fecha a 22.990 M, con un incremento del 0,9% sobre el segundo trimestre y del 4,1% sobre un año antes. Su nivel de deuda «viva» fue equivalente al 80,8% de su Valor Añadido Bruto (VAB).
Según el MAPA, el máximo nivel de endeudamiento del sector agrario se alcanzó en el tercer trimestre de 2008, con 23.936 M, es decir, estaríamos un 13,23% y 3.167 millones aún por debajo de entonces, mientras que en la industria de alimentación, bebidas y tabaco llegó un trimestre después, a finales de 2008, con 23.658 M, con lo que estaría más cerca, pero sería aún un 2,9% y 990 millones inferior al de esa fecha.
La reducción crediticia que tuvo lugar entre 2008 y 2014 afectó prácticamente en la misma medida al sector agrario (recorte del crédito concedido del 32,6% entre ambos años), como al resto de la economía (-33,8%), pero no así a la financiación de la industria agroalimentaria, donde esa reducción fue bastante inferior, del 20,7% en ese periodo.
A partir de 2015 y hasta el tercer trimestre de 2019, el MAPA observa una recuperación del crédito tanto en el sector agrario (+23,7% en ese periodo), como en la industria de alimentación, bebidas y tabaco (+20%), pero no así para el conjunto de las actividades económicas (-20,1%).
Además, mientras que las actividades agrarias e industrial agroalimentaria incrementaron su petición crediticia en el tercer trimestre del pasado año, no sucedió lo mismo con el total de las actividades productivas, que vieron recortar su endeudamiento un 1,5% sobre el segundo trimestre de 2019 y un 1,8% en el último año, quedando en 539.792 millones de euros.
Tasa de créditos dudosos
Por otro lado, la tasa de créditos dudosos en el sector agrario experimentó al final del tercer trimestre de 2019 un leve repunte de una décima respecto al segundo trimestre, ascendiendo al 6% de todo el saldo «vivo» de endeudamiento de esta actividad , con 1.239 M y un alza de 24 millones respecto a entonces, mientras que en relación a un año antes, esta tasa es inferior en cuatro décimas porcentuales y en 39 millones menos.
Por su parte, la tasa de créditos de dudoso cobro frente a los concedidos y en vigor en la industria agroalimentaria bajó al 4,2%, repitiendo lo del segundo trimestre de 2019, con apenas 972 millones de euros, unos 5 millones más que entonces, mientras que en relación al mismo periodo del anterior 2008 supone nueve décimas porcentuales y 162 millones de euros menos.
A nivel del conjunto de las actividades productivas, la tasa de créditos dudosos es del 5,9%, con 31.748 M, lo que supone dos décimas porcentuales y 1.690 millones menos (aunque si se excluye la actividad de la construcción e inmobiliario sería del 5,3% del crédito «vivo» y de 22.506 M) que en el segundo trimestre, y 1,5 puntos porcentuales y 8.865 millones menos que a finales del tercer trimestre de 2018, cuando estaba en el 7,4% (26.200 M y un 6,2%, sin sectores de la construcción e inmobiliario).