El Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) es el que suministra dinero al Plan de Desarrollo Rural (PDR) de Extremadura. Gracias a esta línea de financiación, Extremadura puede recibir algo más de 1.530 millones. ¿Para qué? Para, por ejemplo, poder poner en marcha el regadío de Tierra de Barros. Para distribuir ayudas agroambientales o ecológicas entre los agricultores extremeños. Para la modernización del regadío existente. Para la incorporación de jóvenes agricultores. O para el arreglo de los caminos rurales. Esos 1.530 millones son para el PDR vigente, periodo 2014-2020, con la ampliación habitual a 2023 para ejecutarse. Sin embargo, la pandemia y la guerra de Ucrania han hecho que se prorroguen de forma extraordinaria dos años más, por lo que el dinero se puede ejecutar hasta 2025. Actualmente, informa la Consejería de Agricultura, el programa de ejecución se encuentra al 62,1%. Esto es, se han gastado seis de cada diez euros disponibles. Y quedan tres años prácticamente para darle salida al resto del programa. El dinero ejecutado asciende a 951,6 millones. Por partidas, para la mejora y modernización de explotaciones agrícolas se ha gastado el 91% de los fondos (38,2 millones de 42); para modernización de regadíos, el 59,8% (35,4 millones sobre 59,2) y el 75% de la de jóvenes agricultores (62,9 de 83,8 millones). En cambio, solo se ha ejecutado el 5% para nuevos regadíos: 9,3 millones de 185 posibles. El proyecto de Tierra de Barros se nutre en gran medida de aquí. u