El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo abrirá el próximo 23 de enero la ventanilla para solicitar las ayudas de la parte industrial del Perte Agtroalimentario y se cerrará el 28 de febrero de 2023. Dicha línea está dotada con 510 millones de euros , de los que 310 millones se corresponde con subvenciones públicas, es decir un 60,7%, mientras que 200 millones están destinados a préstamos, lo que supone un 39,2%. No obstante, como se ha publicado hoy en el BOE, este presupuesto puede llegar a incrementarse con 200 millones adicionales. La convocatoria ha flexibilizado algunos requisitos, como ampliar el número de posibles beneficiarios y limitar el número de miembros por agrupación. Así, el BOE dicta que todas las agrupaciones sin personalidad jurídica que hayan pactado un acuerdo interno para regular su funcionamiento podrán acceder a la convocatoria. Dichas agrupaciones deberán tener un mínimo de cuatro entidades y un máximo de 60. Las agrupaciones podrá presentar un solo proyecto que cumpla con los requisitos de competitividad, trazabilidad y seguridad alimentaria. Cada proyecto tractor parte con un presupuesto financiable mínimo de 10 millones de euros. Ya a principios de este mes, el Gobierno estaba preparando una rebaja de los avales que se exigían a las compañías . Ahora el Perte establece unas garantías para las subvenciones que varían del 40% al 100% en función de la ayuda total percibida. Asimismo, en caso de los préstamos las garantías exigidas podrían estar entorno al 10% y el 20%. Para las entidades de nueva creación, no obstante, las garantías se elevan hasta el 100% de las subvenciones y el 41% de los préstamos. La ministra Reyes Maroto ha asegurado que con la publicación de esta convocatoria el Gobierno "cumple con su compromiso de fortalecer la industria agroalimentaria y mejorar su competitividad". El sector primario aporta el 10% del PIB español, por lo que es un sector estratégico y "está contribuyendo al desarrollo económico del conjunto de los territorios y más específicamente de las zonas rurales. Este PERTE contribuye a la modernización, sostenibilidad y digitalización de la industria agroalimentaria a través de programas innovadores que promuevan su competitividad", añade Maroto. Otros ejes El Perte Agroalimentario parte con una dotación de 1.000 millones de euros, que se amplió con 800 millones más y está compuesto por tres ejes. Esta primera línea, la mayor dotada, tiene como objetivo fortalecer la industria. Los otros dos ejes, otorgados por el Ministerio de Agricultura, tienen como objetivo digitalizar toda la cadena de valor con un paquete de 454,35 millones y fomentar la innovación y la investigación con una dotación de 148,56 millones. Se espera que genere aproximadamente 16.000 puestos nuevos y que suponga una inyección de 3.000 millones para la economía española.