El sindicato agrario habla de un mal año para agricultores y ganaderos y anuncia movilizaciones contra "este hartazgo".
María José Villanueva
Fernando Luna, en primer plano, junto a Ángel Samper, ha hecho balance del año agrario. Rafael Gobantes Balance agrario de Asaja / 18-12-19 / Foto Rafael Gobantes [[[FOTOGRAFOS]]] Rafael Gobantes
El campo altoaragonés ha vivido otro año soportando males que ya se están convirtiendo en endémicos, con precios estancados, una ganadería extensiva en retroceso, una burocracia que ahoga al agricultor y el ganadero o una normativa no ajustada a sus realidades. Y para colmo, incluso se les acusa de contribuir al cambio climático.
Este es el panorama pintado este miércoles por el sindicato agrario Asaja al hacer balance del año 2019. El presidente del sindicato en Huesca , Fernando Luna, lo resume diciendo que el campo ha pasado "de la preocupación al miedo". "No estamos compitiendo con las mismas herramientas en un mercado globalizado", lamenta, ni se puede influir en los precios, de manera que los rendimientos son negativos , pese a que ha sido un ejercicio con buenas producciones en algunos cultivos.
El cereal sí ha sufrido una merma de un 28% en la cosecha, con unas pérdidas de 49 millones de euros por las heladas y la mala nascencia, y precios estancados de hace más de 30 años. En el caso del maíz, se ha sumado el daño causado por la araña roja, con 14 millones de euros en pérdidas. Asaja asegura que faltan "materias activas para combatir las plagas".
La fruta es un sector "arruinado" por culpa, según el secretario general, Ángel Samper, de la inacción de las administraciones a la hora de disponer los correctores necesarios. "En dos años hemos tenido 20 reuniones para no avanzar nada". Y añade: "No hay contratos, se vende sin fechas y a resultas. Las distribuidoras pagan cuando quieren, como quieren y lo que quieren". Prueba de la mala situación del sector es que los bancos "al agricultor que tiene fruta no le financian".
La ganadería extensiva no lo está pasando mejor, pese a ser una producción con connotaciones ambientales, territoriales y sociales. "Si quien contamina, paga, quien descontamina debería cobrar". Hablando de las políticas de desarrollo rural, dice Samper, "los políticos escupen a la cara a los agricultores y a los ganaderos, aunque dicen ser sensibles al medio rural". De los 1.075 millones de euros del periodo 2007-2013, se ha pasado a 907 en el 2014-2020, pero solo se han ejecutado 720.
Más optimista es la perspectiva para la ganadería intensiva, con el porcino en crecimiento por las exportaciones a China, aunque lastrado por la incertidumbre de las nuevas normativas nacional y autonómica. El decreto de regulación de la gestión de estiércoles provoca "indefensión" mientras no se desarrolle, por las dudas sobre la construcción de nuevas granjas o la ampliación de las actuales. "No ha quedado claro dónde se pueden hacer y dónde no", según el sindicato.
Movilizaciones El secretario general de Asaja Huesca anuncia movilizaciones por este "hartazgo", como han hecho los agricultores franceses. Asaja ha facultado a su presidente nacional, en la asamblea celebrada la semana pasada, para hablar con los otros sindicatos agrarios y establecer un calendario de protestas, "no para cortar carreteras ni molestar a los ciudadanos sino para llegar a la opinión pública y que podamos trasladar nuestra realidad".
M. J. V.