11/02/2020 - 21:54 Actualizado: 22:36 - 11/02/20
No son buenos tiempos para los agricultores, sobre todo en España. Al impacto de las tensiones comerciales con EEUU, que podrían empeorar este mismo mes con el alza de los aranceles a los productos agroalimentarios hasta el 100%, se suma el esperado recorte que sufrirá la Política Agrícola Común (PAC) en el próximo Presupuesto plurianual de la UE (2021-2027), y que los Estados miembros deben cerrar antes de concluir este año. Todo el mundo asume que la PAC se llevará un buen tijeretazo , principalmente porque Europa perderá a uno de sus principales contribuyentes al Presupuesto comunitario con la salida del Reino Unido. El Brexit provocará un agujero anual en las arcas comunitarias de unos 12.000 millones. La reducción está aún por determinar, pero oscilaría entre el 10% y el 13% respecto a los 252.000 millones del actual marco presupuestario, según las propuestas que circulan. Además, los Estados miembros y la Comisión Europea han añadido nuevas prioridades a la lista para los próximos años, como la gestión migratoria o la Defensa.
Agricultura y Cohesión son las dos grandes partidas del Presupuesto comunitario , con algo más de dos tercios de los recursos. Y dado que una mayoría de los contribuyentes netos no quiere abrir más la cartera, la pregunta es cómo de grande será el recorte para hacer sitio a los nuevos objetivos. Las primeras pistas llegarán en la cumbre del próximo 20 de febrero. Fuentes comunitarias y diplomáticas coinciden en señalar que la propuesta realizada por Finlandia el pasado semestre, durante su presidencia rotatoria de la UE, está siendo la base para negociar.
Su propuesta provocó una sonora protesta de España y el resto de países (17 en total) que defienden proteger al máximo la PAC y los fondos de Cohesión. Finlandia fijó el volumen para los próximos siete años en un 1,07% del PIB de la UE (unos 1,087 billones de euros). Representaba un recorte de casi 50.000 millones , respecto a la propuesta que había hecho la Comisión Europea.
En el campo contrario, Holanda, Austria, Suecia y Dinamarca están liderando el debate por reducir aún más el techo del gasto , hasta el 1% del PIB comunitario, lo que representaría aún mayores recortes para el campo. Desde el equipo del timonel de las cumbres, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel , explican que el belga aún no tiene claro qué propuesta realizará a los líderes el día 20 como punto de partida para la negociación.
Posiciones encontradas No obstante, las posiciones son tan distantes que ni en el Parlamento Europeo, ni en la Comisión ni entre los Estados miembros esperan que la próxima semana se vaya a lograr un acuerdo, e incluso algunos ya hablan de una cumbre extraordinaria en abril. El presidente Pedro Sánchez comentó la pasada semana, tras reunirse con Michel en Bruselas, que una de las "cuestiones fundamentales" para España será la defensa de los pagos directos a "nuestros pequeños y medianos agricultores".
Aunque se espera que el tajazo a la PAC sea significativo, veteranos en la negociación comentan que habrá que esperar hasta el final para ver la verdadera dimensión. La pelea que haga Francia por proteger a la PAC, su vaca sagrada, en el último minuto resultará decisiva.
Además, está por determinar la llamada convergencia externa , que reduce la diferencia en las ayudas que reciben los socios por hectárea en función de su antigüedad, y que beneficia a los más veteranos. A pesar de la poca claridad que existe sobre el futuro volumen del Presupuesto y el reparto entre prioridades, lo que parece bastante probable es que nuestro país pasará a ser contribuyente neto, por la mejora de su peso económico en relación al resto de los socios, máxime después de la ampliación por el Este.
Además, el Brexit ha complicado todavía más las negociaciones del futuro de la propia PAC, las cuales ya venían avanzando a trompicones y tienen por delante importantes obstáculos que salvar. Los países comunitarios deben ponerse, pues, de acuerdo sobre los criterios para repartir los fondos , o qué constituye ser un agricultor, es decir, quién puede recibir las ayudas, o cómo se i ncluye la dimensión más ecológica que quiere dar la UE a sus políticas.