La empresa pone una pica en Valencia y marca el paso al sector por la apuesta por la digitalización de sus máquinas, que están conectadas en tiempo real con su central logística en Huesca
Lanza un proyecto de la mano de Defeder y Viñas del Vero que reconvierte los posos de café en abono para viñedos del Somontano
El presidente y fundador de Eboca, Raúl Benito, en una zona de descanso desarrollada por la compañía oscense. EL PERIÓDICO
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Eboca refuerza su liderazgo en el sector de las máquinas expendedoras en Aragón , con el café como punta de lanza. La empresa oscense, que se encuentra entre las diez mayores del vending en España, ha comprado recientemente la firma zaragozana Click & Joy, lo que consolida su ya amplia presencia en el mercado autonómico, donde hasta ahora había crecido de forma orgánica con una oferta diferencial basada en la excelencia, la responsabilidad social y la innovación tecnológica, un apartado en el que es pionera a nivel nacional e, incluso, europeo.
Prueba de ello son las visitas de empresas de Francia, Holanda, Alemania, Polonia, Portugal o Croacia que recibió el año pasado en su sede de Huesca para conocer el modelo de gestión que le distingue de la competencia. Estas modernas instalaciones, de 12.000 metros cuadrados de superficie, se sitúan a pie de la autovía A-23, desde donde se divisan sus dos vacas gigantes (Valeria y Lorenza) de 4,5 metros de alto, con las que reivindica el uso de buena leche en sus cafés con leche, cortados y capuchino.
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La compañía, que atesora más de 40 años de trayectoria, hidrata, endulza y aporta energía a miles y miles de personas en cientos de centros de trabajo y edificios públicos. Una presencia que se ha ido extendiendo como un a balsa de aceite por las tres provincias aragonesas, «sobre todo gracias a que nos recomiendan», dice orgulloso Raúl Benito, el emprendedor que fundó la empresa en 1982 cuando tenía apenas 18 años. Su ámbito de actuación también se extiende a Lérida y la Comunidad Valenciana , en este último caso a través de un franquiciador.
Pero si por algo se distingue por la digitalización. «Somos una empresa con solera, pero a la vez con muchas inquietudes» , subraya. Todas las máquinas de Eboca están conectadas en tiempo real con su centro de operaciones de Cuarte, a pocos kilómetros de la capital oscense, donde tiene el almacén logístico, el tostadero y las oficinas. La adopción de la telemetría de manera integral, desde el sistema de gestión y operación hasta el pago por móvil, le ha permitido crecer y robustecer la expansión de su actividad.
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«Nos permite desarrollar una organización logística tremendamente eficiente», apunta. El uso de esta tecnología permite que la reposición de productos sea precisa y planificar las rutas de la forma más eficiente y respetuosa con el medio ambiente. «Visitamos a los clientes en función de sus necesidades reales, lo que implica que no se hagan viajas en balde», destaca,
El líder en servicios de vending, que también tiene máquinas expendedoras de bebidas frías o productos de alimentación en espacios públicos, superó el pasado año los 7 millones de facturación, un 14% más que en 2022 . La plantilla está formada po r 54 trabajadores .
Tras una etapa centrada en el desarrollo de tecnología y la integración de Click & Joy, que se hizo efectiva este lunes jurídicamente, la empresa centra ahora sus esfuerzos en la sostenibilidad de la actividad. «El foco ahora lo tenemos en mejorar lo que hacemos», explica. En esta estrategia se enmarca el proyecto que reconvierte los posos de café de sus máquinas en abono para viñedos, una iniciativa que ha puesto en marcha de la mano del fabricante de fertilizantes orgánicos Defeder y la bodega Viñas del Vero , de la DO Somontano.