El choque por el derribo del hotel sigue en todo lo alto, pero el presidente de la Junta presume de buena relación con la ministra de Transición Ecológica en contraste con la confrontación con Montero La línea directa entre San Telmo y el Ministerio de Transición Ecológica funciona bien a pesar del cambio en la cartera medioambiental del Gobierno y el temblor que ha supuesto para las relaciones entre la Junta y el Ejecutivo central el desembarco de María Jesús Montero en el PSOE andaluz. Juanma Moreno recibió la visita de Sara Aagesen en el viejo palacio barroco a finales de año y esta semana ha presumido de esa conexión en la inauguración de una obra hidráulica en el Campo de Gibraltar . "Tenemos una relación fluida porque hablo con ella con frecuencia", llegó a decir Moreno el martes en la inauguración de las conducciones de agua de la zona norte de San Roque para mostrar esa buena sintonía. La buena relación entre Aagesen y Moreno ya existía con la anterior responsable de Transición Ecológica, Teresa Ribera , ahora vicepresidenta de la Comisión Europea. El barón andaluz no participó con la misma virulencia en la estrategia que el PP puso en marcha tras la DANA de Valencia después de ser capaz de encauzar una relación que empezó con un conflicto muy ruidoso. Ribera llegó a tachar de "señorito" a Moreno en medio de la polémica por la ley de regadíos del entorno de Doñana, pero esta ley acabó enterrada gracias al acuerdo en defensa natural que el Gobierno y la Junta firmaron a finales de 2023. Moreno y Ribera escenificaron aquella entente con un paseo juntos por el humedal en la zona más cercana a la aldea del Rocío y un año después Aagesen renovó con la citada visita a San Telmo después de un paseo por la finca Los Mimbrales, también en el entorno de Doñana . Apenas 15 días después de aquella foto en el palacio de los Montpensier, hoy sede del Gobierno andaluz, María Jesús Montero se convirtió en la secretaria general del PSOE de Andalucía . Y ese paso de la vicepresidenta primera inauguró una nueva etapa de confrontación entre Junta y Moncloa que ha tenido en la quita de la deuda el principal motivo, pero también en un asunto que compete al departamento de Transición Ecológica. Montero se fue a Carboneras , justo delante de la mole blanca que Junta y Gobierno quieren tirar desde hace casi dos décadas aunque no se aclaren en las formas. La titular de Hacienda anticipó la decisión que corresponde a Transición Ecológica y que pasa por expropiar parte de la parcela donde se levanta el hotel y exigir lo mismo a la Junta. El departamento que encabeza Sara Aagesen dejó el envite a Montero, pero después asumió la reunión de la comisión mixta que se reunió en San Telmo el pasado 4 de marzo y que sirvió para constatar el desacuerdo entre las dos administraciones, ya que el Ejecutivo andaluz insiste en que la vía para derribar el Algarrobico pasa por la revocación de la licencia, en manos del Ayuntamiento de Carboneras . El derribo del hotel promovido por la constructora Azata del Sol sigue atascado y la última novedad es que los jueces del TSJA, como ha publicado eldiario.es, han dado un mes al consistorio almeriense para que revise el permiso urbanístico y así hacer posible la demolición. Esa es la vía por la que apuesta la Junta y la que defendía Transición Ecológica antes de la llegada de Montero a San Vicente , sede del PSOE andaluz. El problema es que el Ayuntamiento argumenta que no tiene recursos para afrontar el proceso y teme una posible responsabilidad económica que dejaría en quiebra al consistorio de Carboneras, por lo que reclama ayuda a las administraciones autonómica y central. Mientras se desatasca esa situación, el nexo entre San Telmo y Transición Ecológica sigue dando frutos, aunque en el entorno de Aagesen aseguran que la comunicación con Moreno se circunscribe sobre todo a lo asuntos relacionados con Doñana . Está en ciernes la publicación de las bases de las ayudas a los agricultores para la reconversión de cultivos de regadío en otros menos exigentes en recursos hídricos e incluso en parcelas forestales. Y el Gobierno incluso ha aumentado la dotación desde los 20 millones previstos inicialmente a los 28 que se dedicarán en esta primera oleada. No obstante, el humedal andaluz no es el único asunto que compete a las relaciones entre la Junta y el Ministerio de Transición Ecológica, como demostró Moreno en la inauguración del martes en San Roque. Además de las nuevas conducciones, el presidente andaluz anunció que su Ejecutivo pondrá en marcha la redacción del proyecto de la presa de Gibralmedina . Se trata de una infraestructura que lleva en cartera casi 30 años y le corresponde al Gobierno central. "Pero vamos a colaborar al máximo", dijo dirigente popular, que dedicará 2,2 millones a diseñar las obras del embalse y las conducciones necesarias para que los 80 hectómetros cúbicos de agua que almacenará puedan ser de utilidad para el Campo de Gibraltar y la zona occidental de la Costa del Sol . Esta interlocución, expresan en el Gobierno central, es fruto de conversaciones con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán , que estableció una relación de confianza con el consejero andaluz de Agricultura y Agua, Ramón Fernández-Pacheco, que hasta el pasado verano tenía las competencias de sostenibilidad. La solución prevista tiene un coste superior a los 700 millones de euros y permitirá dotar más agua al Campo de Gibraltar en los momentos de sequía para evitar cortes de agua, explicó Moreno, que avanzó que los trabajos solucionarán los problemas de escasez de agua en los próximos 50 años. La Junta y el Gobierno tienen también en cartera las conducciones de otra presa, la de Rules , que debe aliviar también la falta de agua en Granada, sobre todo en la zona más próxima de la costa. Se trata de otro proyecto eternizado que se desbloqueó hace unos años por un acuerdo entre la Junta, el Gobierno y los regantes. La empresa pública Aquaes remitió a principios de esta semana un borrador de las conducciones a la comunidad de regantes del Bajo Guadalfeo, un nuevo paso después de que hace unos meses se reunió el grupo de trabajo entre ambas administraciones para este asunto, paralelo al de las dos desaladoras proyectadas en la comunidad, en la Axarquía y el Bajo Almanzora . La línea directa entre San Telmo y el Ministerio de Transición Ecológica funciona bien a pesar del cambio en la cartera medioambiental del Gobierno y el temblor que ha supuesto para las relaciones entre la Junta y el Ejecutivo central el desembarco de María Jesús Montero en el PSOE andaluz. Juanma Moreno recibió la visita de Sara Aagesen en el viejo palacio barroco a finales de año y esta semana ha presumido de esa conexión en la inauguración de una obra hidráulica en el Campo de Gibraltar . "Tenemos una relación fluida porque hablo con ella con frecuencia", llegó a decir Moreno el martes en la inauguración de las conducciones de agua de la zona norte de San Roque para mostrar esa buena sintonía.