"Todo apunta a que vamos a volver a un año de producciones medias, en una horquilla en 40-42 millones de hectolitros", destaca la organización.
La Coordinadora Agraria de Extremadura (COAG) se ha mostrado "optimista" de cara a la evolución de las cotizaciones de la uva en origen a tenor de las principales magnitudes que se han conocido durante las últimas semanas y que hacen referencia al "tirón exportador, la sequía y el aumento de consumo".
"Todo apunta a que vamos a volver a un año de producciones medias, en una horquilla en 40-42 millones de hectolitros, siempre y cuando las temperaturas nocturnas no sean muy altas. Además se espera una calidad muy superior a la campaña anterior", ha indicado la organización agraria en una nota de prensa.
Además, COAG ha estimado que las existencias finales de la campaña 2018/19 se cierren "en torno a los 38 millones de hectolitros, unos 3,5 Mhl más que la media de los últimos cuatro años".
En concreto, ha añadido que "hasta enero de 2020 no habrá vino nuevo", por lo que, "si se mantienen el ritmo actual de exportaciones y consumo interno el mercado está preparado para absorber esos excedentes, básicos para el abastecimiento en el enlace de campañas".
Asimismo, COAG ha asegurado que desde la Organización Interprofesional del Vino de España y el Ministerio de Agricultura se "están estudiando medidas de autorregulación del sector, que podrán dar incluso más estabilidad a medio-largo plazo", por lo que, la "normalidad" debería ser "la nota dominante en la vendimia 2019".
"TRANQUILIDAD A VITICULTORES"
Ante este panorama, COAG Extremadura ha pedido "tranquilidad a viticultores y cooperativas" para que "no se dejen arrastrar por los movimientos especulativos de intermediarios y grandes grupos bodegueros", ya que estos "no obedecen a los fundamentos reales de mercado de oferta y demanda".
Concretamente, COAG ha afirmado que existe una "diferencia de precios en tablilla de bodega entre 10 y 15 céntimos/Kg más baratos que en Cataluña" para la DO Cava. De este modo, en la campaña 2014-2015 se recogieron 576,5 millones de kilogramos de uva y 4.265.000 millones de hectolitros mientras que la producción estimada por COAG para este año rondará los tres millones de hectolitros y los 395 millones de kilogramos de uva.
Por tanto, éstas son las previsiones de cosecha que, según las estimaciones de COAG, estarán entre un 15 por ciento o un 20 por ciento "por debajo de la campaña anterior" y un 17 por ciento "inferior a la media" de las últimas cinco campañas.
NIVEL NACIONAL E INTERNACIONAL
A nivel nacional se espera una cosecha media y de alta calidad, que se estima entre los 40 y 42 millones de hectolitros, frente a los 50 millones de la campaña anterior de vino y mosto, "siempre y cuando las temperaturas nocturnas no sean muy elevadas".
De este modo, el tirón exportador, la sequía y el aumento del consumo deberían dibujar "un horizonte de precios al alza en uva de vinificación".
EXPORTACIONES DE MOSTO
Por otro lado, de agosto de 2018 a mayo de 2019, las exportaciones de mosto han aumentado un 7,5 por ciento, hasta llegar a los 900.000 hectolitros. En el mismo período, el vino con destino a destilación ha experimentado un "fuerte aumento", de más del 185 por ciento, lo que hace que se llegue a los 2,2 millones de hectolitros.
A nivel nacional, en los primeros cinco meses del año las exportaciones de vino han experimentado una clara tendencia al alza, superando los 2 millones de hectolitros al mes.
Además, los datos oficiales hablan de un "nuevo repunte" de la estimación anual de consumo nacional de vino, "pasando de los 10,4 millones a 10,6 millones" de hectolitros en el último año.
Todo ello, complementado con un aumento del valor según los datos del panel de consumo alimentario, publicados recientemente por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), que muestran que los españoles invirtieron un 4 por ciento más en vino durante 2018, hasta alcanzar los 1.045 millones de euros, algo que supone 40 millones más que en 2017.