Menos emisiones, más biodiversidad y mejor suelo para producir más y de forma más rentable que con las técnicas convencionales. Estas son algunos de los beneficios de la agricultura regenerativa por la que los agricultores y ganaderos aragoneses han empezado a dar pasos. Varios proyectos se están llevando a cabo dentro de la comunidad aragonesa dentro del programa RAWI (Regenerative Agriculture Works), que tiene por fin acercar la agricultura regenerativa al sector. Iniciativas relacionadas con árboles frutales y tierras de huerta se están llevando a cabo en Fraga , en Huesca, así como en la también localidad oscense de Albelda con ganadería y pastos . El agricultor y ganadero de ovino Carlos Samitier comenzó en la agricultura regenerativa hace tres o cuatro años. En esta localidad cuenta con unas 40 hectáreas en las que está aplicando este método de producción con el fin de obtener pastos para su rebaño de 800 ovejas . Un paso que decidió dar porque "siempre me ha gustado lo natural porque los químicos contaminan mucho", afirma Carlos Samitier a elEconomista A pesar de ello, reconoce que no es fácil porque "es complicado competir con lo convencional. Con los animales, aún, pero si no los tuviera no sería posible", al menos de momento con este sistema de producción, en gran parte, por los altos precios que se vienen soportando en el sector agrario. Los beneficios de la agricultura regenerativa no se ven a corto plazo porque la producción se pierde en los primeros años, aunque a la larga se regenera el suelo, pero "es lento. La naturaleza tiene su tiempo". Actualmente, "reconoce que no se le saca rendimiento a las tierras", cuya cebada, alfalfa o maíz destina a la alimentación de sus ovejas directamente desde el campo, aunque también empaca. La ventaja es que "no hay mala hierba. Las ovejas se comen todas, siempre que no sean tóxicas". Su actividad en el campo no ha cambiado significativamente. "Hago menos horas de laborío y de tractor y no utilizo nada de químicos", que son sustituidos por los excrementos de las propias ovejas. " Ahorro en costes principalmente porque antes echaba nitratos y abonos y ahora no echo nada", lo que conlleva no tener que desembolsar entre 200 y 300 euros por hectárea. Y, además, " compensa porque las ovejas comen más natural . La agricultura regenerativa no compensa si vas a producción, a kilos y kilos y camiones y camiones. Yo lo hago porque me gusta". Este productor cuenta con el apoyo del programa RAWI, impulsado por el organismo europeo EIT Food, dentro de que se imparten talleres con teoría y práctica, además de proporcionar asesoramiento especializado , en Aragón y en otras autonomías con el fin de avanzar en la agricultura regenerativa tanto en España y Europa, donde llevan trabajando en este campo desde hace cuatro años. A esta zona geográfica se ha sumado ahora el Este y Centro de continente. Un sistema viable Este trabajo ha permitido constatar ya la viabilidad económica y ambiental de la agricultura regenerativa gracias al análisis de 400 explotaciones. De momento, se observa que el 60% de los agricultores ha mejorado su nivel de materia orgánica en el suelo . Además, el 68% también ha experimentado mejoras en los niveles de carbono en el suelo y el 38% ha abandonado el laboreo profundo o ha reducido en más del 50% el número de pases. El uso de fertilizantes minerales nitrogenados se ha abandonado en un 17% y los fitosanitarios químicos en un 12%. No obstante, todavía queda camino por seguir avanzando y, sobre todo para que esta práctica se extienda en España, así como en Portugal e Italia. Son tres países que se trabajan dentro del programa RAWI, que comprende ya un total de 30.000 hectáreas, sobre todo de viñedos, olivares, frutales y ganado, especialmente de pequeños productores. La agroganadería regenerativa La agroganadería regenerativa incluye un conjunto de prácticas que tienen como eje común la sostenibilidad y la circularidad de recursos . De este modo, se pretende que sea el propio cultivo el que devuelva al suelo sus elementos de fertilidad, biodiversidad y nutrientes para conservar todas sus capacidades. Bajo esta premisa, se recurre a procedimientos centrados en minimizar el laboreo y, en general, cualquier perturbación del terreno. Además, se reduce la dependencia de insumos externos y se favorece el reciclado y los sistemas circulares. En el caso de la ganadería regenerativa, se establecen sistemas de pastoreo rotativo en las fincas , propiciando la regeneración en los pastos, que se traduce en una mayor cantidad de hierba producida. Los suelos, al ser más fértiles, tienen más capacidad de retener agua y retienen carbono atmosférico. En concreto, se calcula que, con la agricultura regenerativa se podrían capturar en España hasta 34 millones de toneladas de CO2 anuales , lo que equivale al 15% del total de las emisiones anuales del país. A gran escala, se mejora la situación de las cuencas hidrográficas y la resiliencia a los fenómenos meteorológicos extremos y al cambio climático. También se producen alimentos de más calidad, sostenibles y accesibles para toda la población y se logra una mayor rentabilidad al cabo de unos años.