Agricultores de Lleida alertan de que las heladas pueden arruinarla la campaña de la fruta
Temperaturas extremas
Agricultores de Lleida alertan de que las heladas pueden arruinarla la campaña de la fruta
Las temperaturas entre menos dos y seis grados amenazan la recogida de melocotones, peras y nectarinas, según alerta Asaja
Los temporeros, uno de los sectores laborales más vulnerables. / Ramon Gabriel
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Las temperaturas bajo cero registradas durante los últimos días amenazan parte del cultivo de fruta esta temporada. Melocotones, nectarinas, peras, manzanas o paraguayos pueden verse seriamente afectados si el frío atípico para estos meses del año persiste, según alertan desde la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores ( Asaja ). El presidente de la patronal agrícola en Catalunya, Pere Roqué , ya lamenta un "alcance importante" producido por las heladas de la noche del sábado al domingo en los cultivos de fruta de Lleida , en declaraciones a Europa Press. "Las temperaturas han bajado más de lo que pensábamos", ha coincido Jaume Pedrós , de la Unió de Pagesos .
Desde Asaja prevén que el nivel de afectación será especialmente intenso en las comarcas del Segrià , el Pla d'Urgell y la Noguera (Lleida) y ha explicado que el grado de perjuicio depende del tipo de fruta. El caso de los cultivos de nectarinas, melocotones y paraguayos -por lo que se refiere a fruta dulce- y manzanas y peras -respecto a la fruta de semilla- son las cosechas más expuestas y que pueden verse mermadas por el temporal.
El descenso brusco de las temperaturas, entre los -2 grados y los -6 grados, y la duración en el tiempo de las mismas ha pillado de imprevisto a los agricultores de la zona, que ante su afectación han activado coberturas de agua y fuego durante la noche para minimizar el impacto de las heladas en sus cultivos. El proceder de los trabajadores del campo es durante la noche encender o bien hogueras o lámparas para subir algún grado el aire del campo, o bien regar con aspersores, lo que provoca que se cree una capa de hielo en torno a la flor del árbol, lo que, contrariamente a lo que pudiere parecer, le protege de la helada exterior.
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