En esta selección podrás encontrar botellas desde los 6 euros para disfrutar las tardes de sol AT Roca inaugura una bodega ecosostenible y energéticamente eficiente La primavera está a punto de llegar y la subida de temperaturas de estos días lo prueba. Las terrazas se llenan, hay más gente en las calles y los días se alargan. En esta selección te recomendamos siete vinos rosados para acompañar los nuevos días de flores y calor, todos frescos y ligeros, perfectos para disfrutar de una tarde soleada con amigos. Además, podrás encontrar opciones desde seis euros. No te pierdas estas botellas singulares que se recogen en La Guía de Vinos 2023 , dirigida por Lluís Tolosa con la colaboración de Ferran Centelles, Meritxell Falgueras, María José Huertas, Alicia Estrada y Zoltan Nagy. Si hasta ahora te habían dicho que el rosado ha de ser del año, aquí te traigo esta rara avis. Cada año intento catar el máximo de vinos rosados de todos los estilos, pero creo que el que más me ha marcado este año ha sido este 200 Monges Rosado Reserva 2017. El año pasado ganó el premio Enoturismo y Desarrollo Local en los Best Of Wine Tourism Bilbao-Rioja , por la recuperación y divulgación del legado cultural del desaparecido monasterio de San Martín de Albelda, sobre todo del Códice Albeldense datado en el año 974. Es una joya de la miniatura altomedieval concebido como compendio del saber del siglo X, vinculado a las cuevas de la Peña Salagona, donde en su día estuvo el antiguo monasterio rupestre entre los siglos V y X. Allí llegaron a habitar más de 200 monjes. Miguel Ángel Rodríguez, enólogo y propietario de Bodegas Vinicola Real, catando este rosado en la bodega me dijo que cada vino elige su tiempo. No lo entendí del todo bien y le pregunté por qué. Decidió que sus mejores vinos madurarían en sus calados subterráneos hasta que por su carácter fuesen capaces de conmover, de emocionar. Y de verdad que en varios de sus vinos lo ha conseguido. Este rosado es peculiar, sorprendente, y tiene la capacidad de transportarte a varios estados emocionales: calma, alegría, drama, incluso sorpresa y admiración. Al degustarlo, es persistente, te enamoran los toques sutiles de fruta del bosque y las notas tostadas con matices de hierbas aromáticas ¡ En el paladar es pura seda ! Hazte con una de las 6.600 botellas y déjate sorprender y enamorar por el color rosa. A veces, el lenguaje técnico del sumiller se convierte en una jerga poco inteligible para los no profesionales. Sin embargo, uno de los adjetivos sumillerísticos me parece magnífico: los vinos unicornio. Un unicornio es un ser mitológico. Un animal fabuloso con figura de caballo y con un cuerno recto en mitad de la frente. Un ser imaginario, tan bello y puro que fascina a toda la familia, en especial a los más pequeños. En el mundo del vino, los unicornios embotellados sí existen, pero son tan escasos y preciados que hacerte con alguno de ellos es toda una proeza. Vinos como los producidos por Richard Leroy, Overnoy, Mugnier, en Francia. O el Tondonia Blanco, Sketch, Trafalgar, en España, son algunos ejemplos. Aquí os presento un nuevo unicornio: Akutain Rosado Gran Reserva 2016. Solo 600 botellas de esta añada. En este caso, he jugado como alumno aventajado y he adquirido una buena cantidad de este vino para el restaurante Enigma de Albert Adrià, donde colaboro habitualmente. En un lugar con un talento creativo tan elevado como Enigma, todo es posible, incluso encontrar un unicornio. Jon Peñagaricano es el dueño de Bodegas Akutain y de este vino rosado. Un vino idiosincrásico, porque no hay muchos rosados Gran Reserva en La Rioja. Fluido en el paladar, con expresión de evolución y madera marcada. Akutain es ejemplo en el excelente uso de tradicionales técnicas de vinificación. Catarlo es como beber una parte del pasado. Un vino insólito, muy clásico, que no volverá a ver la luz hasta la añada 2020. Pasaremos cuatro largos años sin él. Cuando se trata de viajes vitales lo importante no suele ser el destino, la clave es el propio viaje, el camino que transitamos, un sendero que nos descentra de nuestro propio yo y nos moviliza continuamente de la sorpresa al aprendizaje. Algo así debió de vivir Jorge Monzón, burgalés de La Aguilera, cuando abandonó su pueblo natal y recaló tras variadas peripecias en Domaine de la Romanée-Conti, el viñedo más soñado de Borgoña. Volvió a España y tras su paso por Vega Sicilia y Arzuaga cerró el viaje reencontrándose de nuevo en el origen. Había aprendido la importancia del terroir , diálogo místico que une tierra, clima, variedad y las manos del viticultor, propiciando en cada viñedo una conversación única e irrepetible. ¡ Y qué mejor terruño que los viñedos familiares ! Pícaro del Águila defiende la tradición ancestral de los claretes castellanos, mezcla de uvas tintas y blancas unidas en la viña. Se vinifica sin despalillar, sin separar el raspón del grano, como se ha hecho siempre; se pisa en el lagar y el mosto resultante fermenta en las cuevas de la bodega. Pasa luego a cubillos de madera y finalmente es embotellado sin clarificar ni filtrar. Alejado de modas, el clarete se viste de tonos entre rojos y naranjas. Al primer golpe trae aromas de vino blanco, después aparece la delicadeza del melocotón, la fruta roja, balsámicos de tintos. En boca aúna frescura y complejidad y un final mineral y salino. Sin duda un vino extraordinario al que la madera otorga complejidad y larga vida. Este vino quiere ser embajador en Barcelona del vino accesible, fácil de beber y divertido, sin que esto le reste potencia aromática, volumen en boca y precisión en la elaboración. Su misma presentación ya es una declaración de intenciones. La etiqueta proviene de un grafiti pintado en el barrio del Poblenou (Barcelona) que demuestra la energía del arte urbano. El nombre de Más Amor es porque la foto se hizo el día de San Valentín, el 14 de febrero. El grafiti ya no existe, porque la casa fue derrumbada días después. Es un rosado orgánico procedente de las laderas del río Ebro, de una viña de entre 15 y 25 años de edad sobre suelos arcillosos. Es garnacha, todo menos un diez por ciento. El color rosado es fruto de la maceración durante tres horas y la fermentación en depósitos de acero inoxidable durante dos semanas. No tiene nada de crianza, por eso su tapón de rosca y la botella transparente. Y dentro de la botella también cabe una historia. En 2020 empezaron apoyando el proyecto solidario de Ingrid (@leucos.byingrid), la mejor amiga de la hija de Franck Massard, que tuvo leucemia y se ha podido recuperar. Franck, sumiller francés, es uno de los grandes del sector por su trayectoria profesional internacional. Desde hace años ha elaborado vinos en diferentes sitios de la península que expresan su respeto por la tierra. Más Amor no es solo un vino rosado y un blanco de verdejo, también es un proyecto para participar en la salud de la comunidad social y producir vinos sostenibles. Enate Rosado es uno de los grandes veteranos entre los grandes rosados de España. Uno de sus méritos consiste en que durante 30 años se ha mantenido fiel a su estilo, cosechando grandes éxitos. Incluso ahora, tres décadas después, Enate es la única bodega española que ha ganado medalla con tres de sus vinos en el Concurso Internacional de Cabernets (CIDC), donde se premian los mejores cabernets del mundo, y uno de los premiados fue este Enate Rosado. Enate es muchas cosas. Es la bodega de referencia de la DO Somontano. Símbolo de la arquitectura contemporánea de los años noventa, con diseño vanguardista del arquitecto Jesús Manzanares, cuando apenas había ocho bodegas en la Denominación de Origen. Pioneros en el maridaje de vino y arte, con una magnífica colección de arte contemporáneo que se exhibe en la sala de exposiciones de la bodega, Enate también fue quien puso de moda los vinos de Somontano gracias a su imagen moderna y a la excelente relación calidad-precio de los vinos diseñados por Jesús Artajona. Enate Rosado me ha acompañado estas tres décadas de profesión. Siempre con su intenso color granate oscuro, característico de la variedad cabernet sauvignon , fiel a como ha sido siempre, sin dejarse influir por las nuevas modas de los vinos rosados pálidos. Más intenso en nariz y en boca que la mayoría de rosados. Con alma de tinto, intenso, corpulento y carnoso. Con buena carga frutal, cerezas picotas, arándanos y frambuesas, notas a caramelo de fresa y finas notas especiadas. Su etiqueta es una pintura original de Víctor Mira. Un rosado imprescindible. La bodega se funda en 1953 y se ubica en Puente la Reina, en pleno epicentro del Camino de Santiago. Navarra es una denominación de origen donde la uva garnacha campa a sus anchas y se contemplan climas tan dispares como el continental, mediterráneo y atlántico, gracias a la proximidad del Pirineo, la cercanía del valle del Ebro y la influencia de mar Cantábrico. Disfruta además de diferentes suelos y paisajes que dan gran variedad de vinos. La edad de las viñas ronda los 60 años en el caso de las garnachas, dando una buena calidad de uva. Cada vez son más las personas consumidoras de vino rosado, y además los rosados empiezan a tener un papel relevante gastronómicamente hablando. El Viñedo Cinco es un rosado muy laureado. No solo lo he elegido por su bonito color rosado, lo he seleccionado por su jovialidad y frescura, elaborado en depósito de acero inoxidable, no tiene crianza en barrica. Ganador de una Medalla de Oro en el concurso internacional Grenaches du Monde 2022 , ha sido elegido Mejor Rosado de Navarra 2022, convirtiéndose en el vino rosado institucional de la DO Navarra, así que es el rosado elegido para sus acciones oficiales de promoción. De color rojo carmesí intenso y nariz fragante, frutal y floral. Destacan los aromas a frutillos del bosque y albaricoque, notas lácteas y florales, hierbas frescas y caramelo rojo. En boca es refrescante, crujen los frutillos rojos en el paso, su acidez es viva y el final con toques a yogur y flores. Es goloso en su conjunto. Siempre he tenido un gran respeto por los vinos de las cooperativas, y siempre que puedo intento ponerlos en valor. A veces olvidamos su gran relevancia, pero la cooperativa Vinícola de Sarral es el mayor productor de trepat en el mundo. La variedad trepat , autóctona de la Conca de Barberà, representa el 50% de su producción. Además de identidad, la cooperativa también tiene un gran valor social, histórico y arquitectónico. El cooperativismo en Sarral nació con el Sindicato Agrícola (1907) y el Sindicato de Vinicultores (1913). Poco después construyeron su bodega de arquitectura modernista (1914), obra del arquitecto Pere Domènech i Roura, hijo de Domènech y Muntaner. Después ambas entidades se fusionaron en la Cooperativa Vinícola de Sarral (1959), que hoy utiliza la marca Portell. Sus socios suman 1.150 hectáreas de viñedos. Dentro de cada una de sus botellas hay vino, pero detrás de cada una también hay muchas familias unidas durante más de un siglo para sobrevivir juntos al duro trabajo en el campo. Este año han presentado varios vinos nuevos. El que más me ha gustado es este Secrets Pàl-lid de Trepat. Un rosado pálido de estilo provenzal, a la moda de los rosados pálidos, pero profundamente local y autóctono, monovarietal 100% trepat . Enamora por su ligereza y sencillez. Color rosado pálido con suaves tonos salmón. Alma de blanco, cítrico y refrescante, con sutiles notas finales a melocotón blanco y albaricoque, con algunos matices tropicales. Para tener siempre una botella fresquita en la nevera.