Esta región vitícola se ha puesto las pilas en los últimos años. ¿Quieres descubrirla? El peor vino de supermercado de Bélgica consigue la medalla de oro en un certamen internacional Ancha es Castilla y cada vez más variada, donde encontramos vinos muy interesantes de elaboraciones muy diferentes y en muchos casos sorprendentemente frescos. En esta selección encontrarás 7 botellas de origen manchego elaboradas con variedades como la Bobal, la Pampana Blanaca o el Sauvignon Blanc. Este vino de altura agradece la altitud, hecho que se refleja en una buena acidez y su resultado muy vertical y afilado. Su suelo arcillo-calcáreo le aporta mucha mineralidad y de hecho el final es salino, casi salado. La nariz es muy varietal con notas de piña, manzana y cítricos, además destacan toques ahumados, finas maderas y especias dulces por sus 9 meses de barrica francesa. La boca es muy envolvente y frutal. Largo final y larga vida aún en este vino. En este Quixote, la variedad Tempranillo se complementa a la perfección con las variedades Merlot y Petit Verdot. Este coupage le aporta más matices al vino, así como su año en barrica de roble francés y americano. Se expresa aromático, con dominio de fruta roja y negra fresca, toques balsámicos, hierbas de campo y monte bajo. La boca es amplia, fresca, carnosa, frutal y con repique de las notas balsámicas en el final. Se trata de una bodega que en la mayoría de sus vinos ha pulido con finura y elegancia variedades de uva foráneas. En este caso las uvas son más familiares y envejecidas en roble francés durante 12 meses. Su color es muy intenso con dominio de hierbas, en su fruta destaco la mora, cereza y frambuesa. Apuntes de monte bajo y mentolados le dan complejidad. La boca es tersa, con buena acidez y una tanicidad herbácea y crujiente. En este interesante proyecto se embarca Curro Bareño, con gran bagaje en la Ribeira Sacra. El vino ha reposado 7 meses en fudres, que le dan complejidad y le aportan más matices. Se trata de garnachas viejas que se desarrollan en suelos graníticos y con altitud favorable para conseguir un perfil fluido, fresco y floral. En la boca es goloso y frutal con dominio de fruta roja y un final mineral. En este vino se vendimian las uvas durante la noche para preservar su aroma. Es muy expresivo y fresco en su conjunto. Destacamos aromas de frutas exóticas como mango, cítricos como pomelo y de hueso tipo melocotón. Ofrece también hierbas de campo recién cortadas y flores. En la boca es muy frutal en el paso y ligeramente herbal en su final. Este vino tinto es un monovarietal de viñas muy antiguas y recuperadas, con un escrupuloso trabajo artesanal. Es muy frutal con peso en fruta roja, cacaos, especias y flores. La boca es sorprendente en su final, donde lo definiría casi como salado. Presenta buena acidez, tanicidad y su fruta es muy jugosa en el paso. Su crianza mezcla roble francés y americano. Las uvas proceden de la parcela Las Carboneras, con crianzas en depósitos de barro con forma de huevo. Los viñedos se desarrollan en suelos calizos y arcillosos y se trabajan en ecológico. Disfrutan de una buena altitud que le imprime frescor al futuro vino. En este vino se trabajan las lías que le dan más volumen en boca. Destacan aromas de pomelo, flor de azahar, frutillos rojos, rosas y algún toque lácteo.