València, 19 jun (EFE)-. Los expertos reunidos en el foro ftalks, que concluye este miércoles en València, han coincidido en que el futuro del sistema alimentario necesita innovación que genere valor, basada en el trabajo conjunto y que dé lugar a soluciones que sean eficaces y capaces de responder a necesidades locales y globales. València, 19 jun (EFE)-. Los expertos reunidos en el foro ftalks, que concluye este miércoles en València, han coincidido en que el futuro del sistema alimentario necesita innovación que genere valor, basada en el trabajo conjunto y que dé lugar a soluciones que sean eficaces y capaces de responder a necesidades locales y globales. Como ha apuntado el CEO de KM Zero, Raúl Martín, en su bienvenida, el objetivo de este encuentro es crear un diálogo y ser influyentes, gracias al trabajo conjunto entre 100 ponentes de 20 nacionalidades, emprendedores, administraciones y fondos de inversión (con alrededor de 4.000 millones de euros bajo gestión). "La innovación si no genera valor, no vale para nada", ha señalado Martín, tras subrayar que el foco de este foro es el triple impacto personas-planeta-prosperidad vinculado a un sistema alimentario más sostenible, saludable y justo. La directora general de Emprendimiento e Internacionalización de la Generalitat Valenciana, Ester Oliva, ha incidido en la importancia de un diálogo que "da pistas" sobre el futuro que tienen que aterrizar en la realidad de las empresas, de modo que influya en la alimentación, la salud y la competitividad económica. En este sentido, el director general de la Capitalidad Verde Europea, en el ayuntamiento de València (primera ciudad del Mediterráneo en ser designada), Antonio García, ha recordado que la alimentación es una de las cuatro fortalezas sobre las que se articula la apuesta sostenible de su desarrollo. En la ponencia del profesor de salud ambiental de Johns Hopkins Martin Bloem, ha insistido en que los retos de la alimentación no se puede afrontar de forma general, sino adaptados a las circunstancias de los países, sean climáticos, productivos o culturales, aún de forma más necesaria en las naciones en vías de desarrollo. El director de SDG2 Advocacy Hub, Paul Newham, ha compartido mesa de debate con Bloem, y ha puesto el acento en que "se trata de un problema urgente y no hay tiempo para innovar y regular para conseguir un solo objetivo individual: "Se buscan soluciones simples, y el mundo no funciona así". "Sabemos que es difícil pero rechazo decir que es el fin del mundo. Pero no tenemos mucho tiempo, una o dos décadas, porque el problema pasa a ser muy grave. Hay que dejar de ser negativos y empezar a buscar soluciones aunque no sean suficientemente buenas", ha añadido Bloem. Un espíritu en el que ha coincidido el director general de Alimentación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, José Miguel Herrero, quien ha conversado sobre la innovación abierta como palanca de cambio y ha defendido los éxitos de lo que España ha hecho como potencia alimentaria y que son capaces de inspirar a otras industrias. Herrero ha aludido a la Estrategia Nacional de Alimentación, que prepara el Gobierno, y para la que ha apuntado que se plantea como un proceso "participativo" en el que se escuchen las voces de los que trabajan en la cadena de valor. En el arranque de la jornada, la directora de KM Zero, Beatriz Jacoste, ha presentado "Fooduristic24': Las 100 startups que están creando el futuro de la alimentación", un volumen que se articula sobre elementos como la salud del suelo, la descarbonización, el ahorro energético o el desperdicio de alimentos. Jacoste ha citado a Marie Curie y ha concluido que "nada debe ser temido, sino comprendido; así se tendrá menos miedo". EFE lc/jjr (foto)